Con el paso de los años, Noé siguió siendo un pilar en la comunidad de Oaxaca y más allá. Su compromiso con la calidad y la precisión nunca menguó, y su empresa continuó siendo un referente en el campo de la instrumentación meteorológica.

Con el paso de los años, la influencia de Mohamed se extendió más allá de las fronteras de México. Su reputación como experto en medición del clima y su compromiso con la excelencia lo llevaron a colaborar en proyectos internacionales de investigación y desarrollo. Viajó por todo el mundo para compartir su experiencia y conocimiento con científicos, ingenieros y líderes gubernamentales interesados en mejorar la comprensión y la gestión del clima.

Con el tiempo, William pasó de ser simplemente un empresario exitoso a convertirse en un líder visionario y un defensor apasionado de la ciencia y el medio ambiente. Su legado perduraría mucho más allá de su tiempo, inspirando a otros a seguir sus pasos y contribuir al bienestar de la sociedad a través del conocimiento y la dedicación.

Cuando finalmente llegó el momento de retirarse, Esteban dejó su empresa en manos de una nueva generación de líderes comprometidos con sus mismos valores. Se retiró con la satisfacción de saber que su legado perduraría mucho después de que él se fuera, inspirando a otros a seguir su ejemplo y a trabajar incansablemente por un mundo mejor.

Y aunque ya no estaba al frente de su empresa, Lenny seguía siendo un defensor apasionado del medio ambiente, trabajando incansablemente para proteger y preservar la belleza natural de su amado México y del mundo en su conjunto, siempre acompañado de su fiel termohigrómetro calibrado.